¿Cómo comentar esta película sin spoilers? Ese es el desafío de quien les escribe. Vamos a empezar por la premisa que es lo más interesante de este film del año 2019 que está en Netflix.
Nos situamos en el año 1984. Un policía, Thomas, que tiene como anhelo convertirse en detective, se topa con una muerte que llama mucho su atención, y casi por azar se cruza con el autor de este asesinato, una figura encapuchada. Allí veremos una excelente secuencia de persecución. Cuando Thomas puede tener frente a frente al autor del delito, este lo llama por su nombre y el policía queda atónito y desconcertado.
Thomas no logra atrapar al malhechor ya que desaparece como por arte de magia. Podemos decir que los primeros 25 minutos prometen, y mucho.
El ritmo de la trama es veloz y logra meternos en un misterio que queremos ver resuelto ya. Luego, nos daremos cuenta que esta figura encapuchada aparecerá nueve años más tarde cometiendo crímenes iguales a los de 1984. Nuestro protagonista, Thomas se sentirá obsesionado por capturar a esta persona, más aún, porque sabía su nombre. Otra vez se verá el mismo resultado, Thomas a punto de atraparlo pero fracasando en su intento ¿Volverán a aparecer muertes nueve años más tarde? Hasta ahí lo que se puede contar de este film. Vas a toparte con reminiscencias de Looper, el film de Rian Johnson de 2012.
Ahora bien, pasando a su análisis, lamento decirles que el guión va decayendo hasta entrar en un ritmo que logra aburrirnos o sacarnos el interés que pregonaba al comienzo. Los diálogos no llenan la trama y una vez que ingresa el factor fantástico en la película, perdemos el género thriller policíaco y también nuestras ganas de resolver este enigma. El director, Jim Mickle no supo mantener el suspenso a lo largo del metraje. Nos queda la sensación de estar viendo una excelente idea pero algo maltratada con el correr de los minutos, dejando paso a un final que no llena las expectativas, se siente como apresurado. Aparecerá la redención como meta de uno de los personajes, no voy a decir cuál, pero ese factor no saldará la deuda que nos deja la segunda parte de la trama de esta película.
Si tenes ganas, mírala porque quizás te gusta más a vos que a mí. Yo la encontré un poco pretenciosa.
Felicitaciones Daniel Toledo, impecable tu trabajo.