«Project Power» – Pastiche de poder

Bien es sabido que el cine de superhéroes vende  en lo tiempos que corren, así que un nuevo exploit del genero nos llega de la factoría Netflix, con ingredientes de «Cop Movie» noventero estilo Arma Mortal. Project Power es una película dirigida por la dupla Henry Joost y Ariel Schulman, quienes nos trajeron un par de entregas de la franquicia Paranormal Activity y la interesante «Nerve» (2016).

Protagonizada por el oscarizado Jamie Foxx y el siempre correcto Joseph Gordon-Levitt, nos cuenta la historia de una inescrupulosa empresa que inunda las calles de Nueva Orleans con una droga de diseño, la cual otorga durante unos minutos un poder especial aleatorio al que la ingiere. Como toda droga, se vuelve adictiva y genera efectos secundarios a largo lazo. Entonces las calles se llenan de delincuentes, en su mayoría gente pobre, que delinque causando estragos en explosivos robos que dejan a la policía desconcertados.

En este contexto aparece Art (Jamie Foxx) un misterioso ex militar que comienza a ir tras los pasos de los malos de turno para desenmascarar a los culpables, usando métodos que inicialmente nos pueden sugerir que es un villano mas. Mientras tanto Frank (Gordon-Levitt) es un policía intrépido y de métodos poco ortodoxos que  también intenta llegar al fondo del asunto. Entre ambos se cruza Robin (Dominique Fishback) una adolescente rebelde que trataba de hacer dinero con la venta de las pastillas y a la que Art usará para llegar hasta los creadores de la píldora y así, recuperar también una pieza de su pasado.

Project Power es un thriller de acción bastante correcto y lineal, incluso para sus vueltas de tuerca. La dupla actoral hace bien su trabajo sin desmarcar nunca una gran actuación, haciendo solo  un papel de compromiso con un guion que así lo pide. ¿Cual es entonces el problema de la película? quizá que desde el trailer se haya vendido al film como una cinta de superhéroes, hasta con algún toque gracioso y, sin embargo, el producto final haya sido mas un policial negro con toques de  acción y de denuncia social y racial (con bastantes ligerezas) la cual adolece por momentos con problemas de ritmo y varios huecos en su guion.

El argumento de una píldora que da poderes y a la vez sea una droga adictiva, podría haber dado lugar a una trama mas interesante, pero aquí es bastante poco explotada la idea. Quizá lo mas destacable sean algunos efectos visuales bastante potentes y cuidados y algunas escenas de acción, al menos las que no están fuera de plano u oscuras, porque la fotografía del metraje es mayoritariamente oscura y nocturna.

Project Power entretiene, sin mas, Creo que sera un producto del agrado de aquellos que deseen pasar un buen rato de cine de acción mezclado con un poco de suspenso y ciencia ficción. Dura menos de dos horas, pero a veces se hace un poco larga, pudiéndose haber contado lo mismo en hora y media eliminándose varios momentos de relleno.