Hoy vuelvo a hablar de otra serie nórdica que nos trae la gran N roja. En este caso estamos ante un policial de 6 capítulos que nos atrapa desde el principio y logra que queramos llegar ansiosamente a develar el misterio. El creador de la exitosa The Killing, Søren Sveitrup, vuelve a la carga con este policial/thriller crudo que va directo al hueso con gran efectividad e impacto, siendo esto, quizás su mayor virtud ya que no se anda con chiquitas a la hora de mostrar muertes y vísceras. Hoy podemos decir que estamos en el punto más alto en cuanto a cantidad y calidad de series nórdicas, es bienvenida esta ola de creatividad para salir un poco de Hollywood. No significa que esto sea bueno o malo pero siempre es conveniente variar un poco.
¿De qué va está producción? Nos encontramos ante la desaparición de la hija de 12 años de la Ministra de Bienestar Social del país; luego vemos que ha pasado un año y ella vuelve a su función pública con el caso cerrado por asesinato de su hija ante un criminal confeso. A todo esto empiezan a suceder asesinatos, uno tras otro, con un patrón y una leve relación al caso de la hija de la funcionaria. Una detective que desea dejar el trabajo y su nuevo compañero, castigado por la Europol, son los encargados de desenrollar este entramado hilo. Así, ya estarían presentados los buenos y los malos.
Una particularidad del asesino es que suele dejar en la escena del crimen, un muñequito hecho de castañas. Desde allí se comienza con el típico juego del gato y el ratón donde veremos algunos lugares comunes en los que la serie cae aunque luego logra salir airosa de esas situaciones gracias a la soberbia puesta en escena y su magnífica fotografía, la cual nos guía por un laberinto pleno de enigmas. El ritmo es algo pausado, no es una serie que circule a 180 km por hora, pero sí podemos decir que consigue engancharnos en la trama, estoy seguro de que el espectador saldrá más que contento al final de los episodios.
Una producción muy cuidada, con un ambiente frío, lluvioso, de bosques y granjas, que trasmiten muy bien las sensaciones de los personajes, interpretados magistralmente; si a esto le sumamos un excelente guion donde se entrecruzan política, traumas infantiles, vidas familiares y el sistema policial/jurídico, tenemos grandes ingredientes para lograr una muy buena serie donde nada nos defrauda, incluso es sorpresivo el desenlace sobre quien está detrás de tanta maldad. Punto a favor de la serie.
Si los policiales no son lo tuyo, es igualmente de recomendable ya que sobrepasa el género en sí, incluso dando un guiño a una posible segunda temporada, si es de esta calidad, la esperamos ansiosamente. Celebramos este tipo de apuestas de Netflix. Abajo dejo el tráiler y espero sus comentarios. Nos estamos viendo en la próxima reseña. Recuerden que estamos en instagram, allí somos anochecine_oficial.